Aprovecha el jacuzzi en la habitación para relajarte después de un día explorando la zona. Las vistas son espectaculares y mejoran la experiencia.

Un sitio espectacular, con un ambiente tranquilo e ideal para relaxarse. Comida deliciosa e grandes racións, especialmente o zumo de laranxa. A habitación moi acolledora, con vistas impresionantes. O trato do persoal, un agasallo, sempre amables e atentos.

entorno tranquilo, vistas impresionantes, instalaciones de spa

Los detalles de mantenimiento son preocupantes, como agujeros en las paredes y mobiliario viejo. ¡La limpieza deja mucho que desear!!! Además, las instalaciones parecen en declive y a precios elevados, realmente decepcionante en general.

El entorno tranquilo y las vistas son realmente hermosas.

Mi experiencia en el Hotel Urbisol fue decepcionante. Las habitaciones no estaban bien mantenidas, con detalles que dejaban mucho que desear, como un agujero en la pared y grifos que goteaban. Además, la atención del personal fue muy variable, con muchos de ellos mostrando desinterés y poca actitud de servicio, lo cual es inaceptable para un hotel de esta categoría.

Es un hotel acogedor con un entorno sereno y vistas impresionantes del Pirineo, incluyendo un restaurante con comida exquisita y un área de spa para relajarse.

agradable estancia con detalles a mejorar

Las vistas desde el balcón de la habitación eran espectaculares, lo que hizo que cada momento fuera memorable. Además, el spa ofreció una experiencia relajante y rejuvenecedora, perfecta para descansar después de un día explorando. El menú de degustación en el restaurante fue excepcional, con sabores bien equilibrados y porciones generosas.

Sin embargo, el Wi-Fi en la habitación era bastante inestable, lo que causó inconvenientes durante nuestra estancia.

Las habitaciones en Urbisol son como un abrazo cálido de madera con suelos de parquet y un baño privado que incluye una bañera de hidromasaje perfecta para relajarse después de un día de exploración. El spa es un verdadero paraíso, con piscinas interiores y exteriores que gritan lujo y descanso.

Wi-Fi inestable

Estada tranquil·la i agradable, habitació acollidora amb vistes espectaculars. El spa un veritable luxe per relaxar-se. La comarca preciosa i la gastronomia de 10, especialment el menú de degustació. Un lloc ideal per desconnectar.

El entorno es espectacular, realmente un lugar ideal para relajarse y desconectar. La habitación era muy acogedora con vistas impresionantes y contaba con un jacuzzi que añadía un toque especial a la experiencia. La comida en el restaurante sorprendió con porciones generosas y un desayuno increíble, especialmente el zumo de naranja natural. El servicio del personal, siempre amable y atento a todos los detalles, contribuyó a que nos sintiéramos en casa.

El Wi-Fi en la habitación era bastante inestable, lo que causó algunos inconvenientes durante nuestra estancia. Además, noté algunos detalles de mantenimiento que deberían cuidarse más, como inconvenientes menores en las instalaciones.

Desayuno muy bueno, pero la televisión no funcionaba y el Wi-Fi era pésimo.

Recomiendo para escapadas románticas

La comida, simplemente espectacular. Me encantó el desayuno con un zumo de naranja natural que me dejó impresionado, sin duda lo mejor de la mañana. Además, el trato del personal fue realmente cercano y atento, lo que hizo que nos sintiéramos como en casa.

No fue barato, pero todavía aceptable considerando la experiencia global.

me encantaría volver

Las instalaciones y la comida estaban buenísimas. La cena en el restaurante fue una grata sorpresa con grandes raciones. El desayuno increíble, especialmente el zumo de naranja natural. La habitación tenía un jacuzzi y vistas impresionantes del Pirineo. El personal fue muy amable durante nuestra estancia, realmente se nota su atención.

La habitación que tuvimos era una Junior Suite con balcón, y la verdad, ¡era muy cómoda! Las vistas del Pirineo eran espectaculares y el jacuzzi en el baño le daba un toque extra. Todo bien acondicionado, aunque la habitación un poco pequeña. El ambiente de relax que se sentía era genial, perfecto para desconectar.

Las vistas desde la habitación eran increíbles, podías ver todo el Pirineo. La atención del personal fue muy cercana y atenta a cada detalle. El desayuno, buffet variado y el zumo de naranja natural, todo fresquísimo.

Estoy contentísimo.

Me encantó el spa, especialmente el jacuzzi en la habitación. Además, las vistas del Pirineo son realmente espectaculares.

Me sentí como si estuviera con mi familia, no tengo ninguna queja.